Quizás no se trate de una vieja rama retorcida, nudosa, rugosa y esculpida por el paso de los años de un árbol centenario pero fue elegida para cumplir su función como posadero de las aves en su asalto a un bebedero en estos días donde, apriete o no la "calo", satisfacer la necesidad de beber es fundamental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario